Ramsés II fue el faraón más grande del antiguo Egipto; reinó durante más de seis décadas y construyó una gran cantidad de monumentos en todo el país, cada uno más imponente que el anterior. Pero la verdadera joya de este faraón constructor fue su mítica capital: Pi-Ramsés. Redescubierta a finales del siglo XX en el delta del Nilo, después de tres milenios de olvido, esta ciudad ha sido excavada cada año por arqueólogos y revela nuevos secretos. En 2022, por primera vez, un equipo de arqueólogos dirigido por el profesor Henning Franzmeier emprendió excavaciones en el mismísimo palacio de Ramsés II.